febrero 22, 2008

El premio Pulitzer

Castro inició sus riflexiones en calidad de «compañero Fidel» confesando que durmió como un lirón después de haber dejado montada la carpa del circo sucesorio. Luego de reafirmar que «Cuba cambió hace rato» aclaró que aún lleva las riendas: «Estoy enfrascado ahora en el esfuerzo por hacer constar mi voto unido en favor de la Presidencia de la Asamblea Nacional y del nuevo Consejo de Estado, y cómo hacerlo». Nadie se llame a engaño: Castro sigue ejerciendo el poder tras bambalinas, porque su tesitura dictatorial no requiere que sea presidente del Consejo de Estado ni Comandante en Jefe. Al parecer el Fifo está para empeños mayores. Ya no le hacen falta cargos: Dénme una columna en la página dos de Granma y moveré al mundo.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Ahora sí que se tostó el Fifo.

Anónimo dijo...

No coma usted mierda, anónimo, el tipo está así desde siempre

Anónimo dijo...

!!!!como se parece al guicho!!!!

Anónimo dijo...

De tostado no tiene nada. Todo lo hace con mucha trastienda. Es el padrino mafioso que anuncia su retiro, pero que no tiene que emitir amenaza, tan solo con demostrar que todavía habla, o escribe, es suficiente para que todos sepan que "aquí todavía no se mueve nadie, no se embullen porque el cuartico está igualito".