enero 05, 2008

Lo que dejaron en La Habana


Cuando Ana, Germán y Aris, los integrantes que iniciaron el grupo Los Tres de La Habana comenzaron a llorar en un programa de la televisión local de Miami, muchos de los presentes pensaron que lo hacían por la familia, los amigos, la fama, el público y la obra, que habían dejado en Cuba tras su fuga a Estados Unidos. Y tenían algo de razón, incluso, porque de alguna manera ellos lo dieron a entender cuando en el entrevistador les preguntó el por qué de sus lágrimas, aunque sin dar muchos detalles en su respuesta.
Durante mucho tiempo, Ana Páez y Germán Pinelli solicitaron a todos los niveles de las autoridades cubanas la posibilidad de que su hija más pequeña saliera con ellos a alguna de sus actuaciones internacionales. Así lo hicieron una vez más para su reciente viaje a Cancún, México, pero siempre recibieron un no por respuesta, entre ellas la de Abel Prieto, el melenudo ministro de Cultura.
En medio de ese proceso y a solo unos pocos meses antes de su partida para el balneario mexicano, la niña cayó enferma. Había contraído un estafilococo. Solo duró dos días. Tenía dos años y medio. Su muerte, confesaron a los productores después del programa, aceleró la decisión de salir definitivamente de la Isla. Los Tres de La Habana habían llorado, más que todo, por ella.

Foto © Jeffrey M. Boan, El Nuevo Herald

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Y que hizo la potencia medica para salvar a esa criatura ? Y por que viven " afuera " los hijos de los generales, de los ministros, del satrapa de Eusebio, el " Leal ".
Donde cantan las hijas de Pablo Milanes ? Si Abel la hubiera dejado salir, posiblemente estuviera viva. Que hijo de puta eres Ministro. Con lo cobarde que eres no creo que puedas dormir bien. Te vere en un tribunal llorando por todo el dano hecho y todas las ejecuciones que has firmado como miembro del Buro Politico y, acusado por demas, de poeta falso ( esa es la historia cretino ) . Cosas veredes.

ric dijo...

Dicen que ya la está pagando en parte con el alcoholismo tremebundo que padece. Pero, a mi entender, eso no es suficiente. Abel es un tipo con serios problemas sicológicos desde joven, causados en gran parte por su padre, que era un hombre amargo, cruel y acomplejado a causa de su poliemielitis en una pierna. De niño y adolescente hizo sufrir horrores a Abel, pero éste ya tenía en su alma algún poco o mucho de genes de hijo de puta para haberse convertido en tan mala gente.

Anónimo dijo...

saben lo que le gusta tomar a abel?, vodka con leche. nunca habia oido eso. tal vez por ahi tambien vienen los problemas.