enero 20, 2008
Girón en la memoria
El Miami New Times acaba de publicar un amplio reportaje de sobre la Brigada de Asalto 2506, que abordó hasta el plan de erigir un museo de cinco pisos sobre un terreno de casi tres acres, al fondo de la American Airlines Arena y junto a la bahía, concedido por el condado Miami-Dade. El brigadier castrista Rafael del Pino no vaciló en retorcer esta decisión condal para tildar a la brigada de «actor estatal» y apuntalar así su demanda insostenible contra la propia brigada y otros, que acabó siendo rechazada de plano por la jueza federal Úrsula Ungaro, antes de que el abogado Richard J. Burton tramitara el desistimiento anunciado hipócritamente por Del Pino como «la mejor decisión para el exilio, para Cuba y para la unidad de todos los cubanos», es decir: para todo el mundo menos para el mismo Del Pino, que se dejó enchuchar por Noberto Fuentes. Los veteranos de la brigada tienen que recaudar unos $65 millones para construir el museo y podrían empezar por demandar el cobro de los honorarios de abogado a Del Pino y ahorrarse un dinerote. Por lo demás, el reportaje del Miami New Times no incluyó al único brigadista que pudo matar a Castro, cuando éste pasó en un vehículo descapotado mientras aquel permanecía escondido en un pantano y no se atrevió a disparar por miedo a ser descubierto. Castro comentaría después (La Habana, 2001) la suerte de «que no me disparase, porque ninguno de los dos estaríamos hoy aquí». Su interlocutor era Alfredo González Durán (foto).
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3 comentarios:
No me sorprende esta historia de la vida de Alfredo que siempre ha sido un pendejo.
Mas pendejon es del Pino que en vez de discutir con la gente la metio para los tribunales. Me alegro que le hayan hecho este numero ocho.
Alfredito Duran sigue siendo un penco.
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