Penúltimos Días se hace eco de la noticia del escape de amoníaco en La Habana. Nosotros les presentamos un fragmento de un mail desde Cuba que demuestra cómo oculta la información el aparato censor del DOR, dirigido por el coronel Alfonso Borges en el Comité Central. Hasta el momento, ninguno de los medios de prensa de la Isla, al menos los que salen en Internet, ha publicado una letra sobre este accidente:Les escribo por lo terrible de la manipulación y el peligro para la población que se puso en evidencia ayer, imagínense aquí en horas de la mañana por poco se da una muerte masiva de personas por envenenamiento, aquí en Alamar muchos casi se asfixian , ya que en Berroa hubo un gran escape de amoníaco y afectó a Alamar casi completa, yo desperté sin poder respirar y solo respiraba amoníaco y no había aire puro eso fue casi letal y por la televisión y la radio de eso no se habló nada, no hubo orientación, puse de mi parte enseguida y mojé dos paños, le di uno a Rosa y nos los pusimos en la nariz y la boca, gracias a Dios todo fue pasando, pero fue algo nunca visto, ni vivido. Solo salieron por el Consejo de defensa en la tarde noche diciéndole a los vecinos que debían tomar mucho líquido, que debían tomar mucha leche, “ la que no hay” para desintoxicar la sangre. Manuel.
Ilustración de Garrincha
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