Foto: © AP
enero 16, 2008
El tío Lula y el escribidor
El lunes pasado arribó el presidente brasileño a La Habana dos horas después que Castro concluyera su reflexión «Regalo de Reyes», la cual vino a publicarse hoy miércoles. El martes por la noche, Lula se había reunido por fin con Castro y declarado que éste gozaba de «una lucidez increíble, una salud impecable [y estaba] listo para asumir un papel político en Cuba y asumir el papel que tiene en la historia del mundo globalizado y de la humanidad». Granma suprimió la última parte del comentario en la nota «Despidió Raúl a Lula», quizás porque ésta vio la luz junto con la susodicha reflexión de Castro, quien contradice a Lula en este pasaje: «No disfruto de la capacidad física necesaria para hablarles directamente a los vecinos del municipio donde me postularon para las elecciones del próximo domingo. Hago lo que puedo: escribo». A no ser que el papel político de Castro se ciña en lo adelante a la literatura, desde su sillón ahora emplazado sobre un artilugio de carpintería de la Empresa de Producciones Varias (EMPROVA) del Consejo de Estado.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
9 comentarios:
Aseres miquis, lo que tiene el tipo bajo el sillón es un pallet de la Industria Ligera
eso es lo que queda momia que desea ser fotografiada..que forma de acabar tan patetica
Estoy viendo por TV la misma foto y las explicaciones son de truco. Dicen que es una letrina portátil
El Regalo de Reyes fue la mecedora, y no se extrañen de que sea Made in USA
Habría pensado cualquier cosa, menos que este final para el ‘socio’ entre anciano senil y escritor surrealista, tirando sus señales en código Morse, arbitrarias como una timba metafísica de a’ tras pa’ lante y viceversa. Yo creo que nos están vacilando, por eso no le hago mucho swing. Me llama más la atención la tosca base de madera del sillón... da una idea de la poca importancia que le dan en la superestructura a lo que desde abajo sostiene y permite que el Ubu rey no se caiga de la silla.
Las ruedas no importan, fíjense en lo esponjoso del asiento. Ese maltratado culo tiene que estar bien cómodo.
Los que le han diseñado la imagen de Addidas en Jefe, no se dan cuenta que el colorido de las prendas deportivas le hacen parecer, por contrate, más descolorido. La cabreza luce como un efecto sepia logrado en Photoshop.
Yo creo que le vendría bien unas sesiones de rayos UVA
Creo que te equivocas, Liborio. Ese culito egregio ya está clausurado y sellado. Y hasta cosido para que no se escapen las reflexiones. El salidero ahora le queda más arriba.
Publicar un comentario