Juan Antonio Blanco acaba de irrumpir en el círculo íntimo (id est, con fotico y todo) de los blogueros del portal Cubaencuentro. Al estilo de sus disquisiciones sobre el tercer milenio, Blanco abunda en sonseras camufladas con re-juegos lingüísticos, por ejemplo: los cubanos no carecemos de cultura del debate, sino de cultura de diálogo, que debe sustituir a la cultura de intolerancia. ¡Como si el diálogo no fuera premisa del debate y el debate culto no fuera la clave de la tolerancia! De paso pretende seducir con este toque de vanidad: «No vivimos una simple época de cambios; vivimos un cambio de época». ¡Qué felicidad! Y todo esto para darnos al final el video de Utopía, de Arturo Infante. Le aconsejo a Blanco ser consecuente con su prédica de la cultura del diálogo: ahórrese el teque.El Enano de Washington
Ilustración: Conflicto y diálogo © La Scuola a Colori
6 comentarios:
Ay, Miquis, qué bueno que hablaron de eso, porque el tipo me llenó la cachimba de tierra desde el momento en que lo descubrí ayer! Cubaencuentro lo anunció con bombo y platillo, y yo fui a verlo. Debí haber suspechado cuando vi aquello de "Diplomático" y los otros atributos que le ponen. Me congelé cuando investigué que desde los años 70 es estudioso del "pensamiento"(¡¡¿¿??!! LOL!)del Che y experto en la reconciliación nacional. Me encantó la fotito con cuello de tortuga y rostro angelical con aires y blazer de intelectual demodé. Diplomático graduado en Cuba... yeah, right!! El oximorón del siglo!! Además de eso... qué aburrido--se sabe la misma cantaletita vieja que creó la Marifea Pérez Inestable hace décadas y la repite con una pastosidad pasmosa. Y les aseguro que tiene fascinado y engañado al establishment intelectual liberal de Canadá, donde parece que fue a refugiarse en la escaada ratonil del período especial. Dios mío, ¿porqué los cubanos somos expertos en producir este tipo de elementos? Parta mí, la encueruza de Interviú tiene mucha más vergüenza que este señor.
Hi, Ric, you're fire, es decir: eres la candela, bro
Siguiendo a Los Miquis me fui a Cubaencuentro a buscar lo que decia el Sr. Blanco. Puras galimatias, no entendi nada y no es que sea tan bruto, es que no habia nada que entender. Si se fijan en lo que publica el Sr. Blanco todo es muy "blanquito", no hay toma de posiciones, ni siquiera posiciones de cientifico social, todo es muy neutro [lo que incluso puedo respetar por aquello de que hay que respetar a todos para romper con la uniformidad castrista]. De acuerdo con Ric cuando escribio que "Y les aseguro que tiene fascinado y engañado al establishment intelectual liberal de Canadá,..."; pues el Sr. Blanco trabaja en FOCAL [La Fundacion Canadiense para las Americas] http://www.focal.ca/ y en particular en Cubasource, que es la agencia especializada en el tema cubano http://www.cubasource.org/index_s.asp ; si pierden un par de minutos dandose una vuelta por esos sitios van a ver lo "actualizados" y "blanquitos" que son esos sitios, muy a lo canadiense y muy a lo "Blanco".
Razon tambien para Ric con su apreciacion de la fotico, es para no perdersela: "El regreso del perfecto intelectual castrista", pudieramos ponerle de pie de foto.
El Sr. Blanco se refugio en Canada, pero la lista no juega con el billete, la inmensa mayoria de los refugiados con su titulos de fisicos nucleares, medicos, ingenieros,..., tienen que ganarse la vida como taxistas, factory workers, cleaners y demas honrosas ocupaciones pero bien distantes de su calificacion. No lo puedo asegurar, pero seguramente el Sr. Blanco no sabe lo que es trabajar en una fabrica por 8 dolares la hora lo cual no le alcanza para comer y pagar la renta a la vez. Habria que preguntarle a el y darle la tarea a algun Super Miqui de como fue que engatuso a los incautos de FOCAL. A lo mejor el consul cubano le esta pagando algun favor anterior en su carrera diplomatica o esta cumpliendo una orientacion.
Este Blanco cara de guante formó en Cuba una ONG llamada Félix Varela, que aparecía hasta en la primera plana de Granma y tenía como misión, asignada por Castro, sacarle jugo a las fundaciones extranjeras, que se van con la de trapo. Así el tipo montó oficina en casa con todos los hierros y empezó a vivir la dulce vida en Cuba, hasta que Castro se dio cuenta de que estaba doblándole por segunda con los fullas y vinieron los problemas. El tipo se agarró entonces de su partner canadiense y transplantó para allá lo mismo que tenía en el Vedado. Solo que ahora critica a Castro, por puro resentimiento, pero siempre en el estilo light bajo barniz académico.
El tipo es un farsante, de la llamada nueva izquierda, que piensa todavía en que hay un socialismo con rostro humano
Se rebaja Encuentro con ese soso muelero. Blanco perfecto para otros tiradores inmerecidamente ignorados o postergados por los medios "oficialistas" de la "banda'acá", al decir de Celia.
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