junio 08, 2008

Castro y Ramonet: suspensos en Historia de Cuba

Agustín Bajarano: Imágenes en el tiempo (2003)

Antes que atragantarme con otro «testimonio de Castro» dado por Carlos Franqui, esta vez acerca de un guajiro apodado «el maestro» y fusilado sin juicio en la Sierra Maestra, leo el cuento de Castro a Ignacio Ramonet sobre la caída del Maestro en Dos Ríos:
«El 19 de mayo de 1895, se produce un combate sorpresivo: una columna española se mueve y tiene un encuentro, no muy lejos de donde está Martí. Máximo Gómez, con cierta autoridad de militar, le dice a Martí (…) que se quede allí con un ayudante, que se llamaba La Guardia. Martí no se queda, va al combate y muere. Esto lo cuenta La Guardia. Martí está escribiendo su diario y redactando unas cartas. Allí es donde confiesa: “Todo cuanto he hecho hasta hoy y haré es para impedir, con la independencia de Cuba, que Estados Unidos se extienda sobre el resto de los países de América” (…) Lo dice en la última e inconclusa carta». Ramonet puntualiza: «Es lo último que escribe Martí», y Castro asiente: «Es una maravilla ...».
  • No hubo combate sorpresivo. Martí y Gómez estaban acampados en La Vuelta Grande cuando les avisaron que una columna española marchaba hacia Dos Ríos, al otro lado del río Contramaestre. Los cubanos tuvieron que cruzarlo para batirse contra el enemigo.
  • Gómez no le dijo a Martí que se quedara con un ayudante. En su diario de campaña, Gómez anotó: «Cuando ya íbamos a enfrentarnos con el enemigo le ordené que se quedase detrás; pero no quiso obedecer mi orden y no pudiendo yo hacer otra cosa que marchar adelante para arrastrar a la gente, no pude ocuparme más de Martí».
  • Lo que dice Castro que cuenta [Ángel de] La Guardia [Bello] no consta en la correspondencia de éste ni en el relato de su hijo, Ángel de la Guardia Rosales. Castro repite la versión desatinada que dio Lorenzo del Portillo en el periódico Patria (Nueva York) el 31 de mayo de 1896.
  • Lo último que escribió Martí no fue su famosa carta inconclusa a Manuel Mercado (18 de mayo de 1895), sino la nota del siguiente día a Gómez para avisarle que había llegado Bartolomé Masó y el campamento mambí se había trasladado de Dos Ríos a La Vuelta Grande.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

No creo que Castro, sabiendo de antemano que su conversación con Ramonet sería publicada, metiera tanto la pata. Estamos ante otro ardid de los miquis para ir sutilmente contra Rafael Rojas, cuyo artículo sobre los fusilamientos en la Sierra está enlazado aquí como pretexto

Anónimo dijo...

El libro de Franqui que cita Rojas es el Diario de la Revolución Cubana, que no es un libro escrito por Franqui sino una compilación de documentos y cartas que Franqui sacó de Cuba cuando se exilió en Italia. Casi 800 páginas de documentos y cartas, especialmente entre los líderes de la Sierra y el LLano, donde no hay manipulación alguna del propio Franqui. Así que la información que se encuentra en ese libro es verídica.

Anónimo dijo...

No veo por ningún lado que alguien haya dudado de la veracidad de la información dada por Rojas, pero me llama la atención que antes de citar el documento donde Castro dijo tal cosa cite al compilador. Hubiera sido más elegante decir a quién le escribió Castro tal cosa y cuándo. Lo mismo pasa con las alegaciones de los miquis, que salvo la referencia al diario de Gómez (sobre algo que escribió el propìo Gómez) nada nos dicen sobre la fuente original.

Anónimo dijo...

Por favor, puntilloso, que las alegaciones están referidas a los originales. ¿Quién es Lorenzo del Portillo?