Ira Kurzban, uno de los abogados del «guajiro con recursos» Rafael Izquierdo, solicitó por escrito que alguien del Canal 41 de Miami comparezca a testificar ante el tribunal el próximo martes 2 de octubre y entregue las copias de todos los reportajes que salieron al aire desde agosto 27 de 2007 con declaraciones de Joe Cubas, guardián legal de la niña de cinco años involucrada en pleito de custodia. El Canal 41 respondió que, bajo el amparo de la primera enmienda de la Constitución de los Estados Unidos, las leyes del estado de la Florida establecen desde 1998 que ningún periodista está obligado a servir de testigo o dar información relacionada con el ejercicio de sus funciones, a menos que dicha información no pueda obtenerse de otra forma y sea relevante para decidir cuestiones judiciales pendientes. Kurzban no acreditó este doble requisito ni alegó necesidad indispensable y urgente de la información solicitada para los fines de la justicia. Más bien lo que pretende corregir fallas de su propio trabajo, que presupone seguir y recopilar toda la información que difunden los medios de comunicación sobre el caso que él atiende. No podía esperarse menos de la abogacía de manigua, que presta servicios gratis y fabrica cartas y fotos para probar sus argumentos.
Foto: Uno de los abogados del tándem Kurzban-Magda Montiel, Steve Weinger, interroga a Elena Pérez (madre de la niña involucrada en el pleito custodia). Mientras esto ocurría, ¿dónde estaban Kurzban y su esposa (Montiel), que ahora piden evidencias televisivas? © AP
septiembre 28, 2007
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