octubre 09, 2007

Antes de que anochezca

Carlos Victoria (Camagüey 1950) intentó este lunes abrirse paso fuera de este mundo con sus propias manos, tal y como hizo su entrañable amigo Reinaldo Arenas. Carlitos arrostró una intervención quirúrgica que no trajo mejoría significativa en su lucha contra el cáncer. Luego de ganar el premio de fundación de El Caimán Barbudo (1965), Carlitos fue expulsado (1971) de la Universidad de La Habana por diversionismo ideológico. Para 1978 recibía la visita de la Seguridad del Estado y sus manuscritos fueron confiscados. En 1980 marchó al exilio por el puente marítimo Mariel-Cayo Hueso. Desde entonces residió en Miami, donde venía haciendo su vida laboral dentro de El Nuevo Herald y escribiendo sus obras: Las sombras en la playa (1992) y Puente en la oscuridad (Premio Letras de Oro, 1993), La travesía secreta (1994) y La ruta del mago (1997), El resbaloso y otros cuentos (1997) y El salón del ciego (2004).
Foto: © El Ateje

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Es decir, que intentó suicidarse, pero sobrevivió ¿no es así? ¿Puedes aclarar, por favor? Gracias.

Anónimo dijo...

si, exactamente.

Anónimo dijo...

Un poco de respeto, por favor.

Anónimo dijo...

Nadie ha dicho nada irrespetuoso. El que puso la primera nota no fue muy claro y yo le pedí un poco más de precisión, pues conozco a la persona implicada en el asunto. Eso es todo. Calma.

Anónimo dijo...

Para evitar malentendidos: Carlitos intentó suicidarse y quedó muy mal, prácticamente deshauciado. Es una nota de dolor, y no entiendo por qué un anónimo pide respeto.

Anónimo dijo...

se pide respeto pues no hay que estar diciendolo todo por esta vida. sabemos que a ustedes les apasiona el periodismo y quieren estar dando la ultima news pero por favor la gente buena merece ser dejada en su lugar y estas cosas suelen ser penosas y hacen a ustedes perder muchos puntos de raiting

Anónimo dijo...

Sentimos mucha triteza por Carlitos. A los Miquis les agradesco que me pusieran al tanto de esta penosa noticia porque asi puedo rogar por nuestro amigo.
Al anonimo anterior quiero decirle que en este mundo hay que decirlo todo y con el tono que lleva.