El porque de los Miquis

Mickey Mouse, esta especie de ratón humanizado, es la obra maestra del diseño y el buen gusto en la creación de dibujos animados. Fue creado en 1928 y su origen es disputado. La historia más verosímil cuenta que fue el dibujante Ub Iwerks quien lo dibujó a petición de Walt Disney para compensar la pérdida de derechos de Oswald, el conejo afortunado.

Mickey nació exitoso, en los años 30 era ídolo de niños y adultos de los cinco continentes: el presidente Franklin Roosevelt o el rey Jorge V de Inglaterra exigían que en sus sesiones privadas de cine se incluyera un corto del ratón más viajero de la historia.

Esta historia tiene lógica, lo que no me queda claro es por qué el nombre de este personaje, que despierta simpatía, buen gusto y ternura, es la frase referente aquí en Miami (porque la verdad no he oído ese término en otro lugar) que alude al mal gusto, a lo fácil, a lo cheo, lo picúo, lo cutre, lo hortera, o lo naco, una especie de sinónimo de “túmbalo que es de cartón”. Curioso porque el término no es del uso exclusivo de personajes con buen gusto, o de cierto nivel intelectual. Es usado igualmente por gente de a pie común y corriente, nada rebuscada y alejada de cualquier patrón clasista.

Sencillamente ser “Mickey” es lo que cada cual considere que sea “Mickey”: “una opinión Mickey”, “un par de zapatos Mickeys”, “un programa de TV “Mickey”, “un personaje Mickey”, “una canción Mickey”... ¡Vamos, que aquí nadie se escapa del “Miquismo”!

Nosotros aquí queremos ser Miquis de verdad, nos encanta la ternura del personaje y queremos ser cheos y picúos cuando tengamos que serlo y serios cuando corresponda serlo. Nuestro lema: “queremos que nos congelen” como a nuestro creador y pasar a los posteridad por eso vamos a “postear” aquí.

¡Ah!, si alguien sabe de donde salió el termino ser “Mickey” que deje su comentario, “plis”.

PIXIE